Biodiversidad - Abr 2010

Al filo de la selva, en el centro del mundo

Pareciera que no hay nada que sorprenda ya a la actual sociedad globalizada de Occidente acostumbrada en su cotidianidad a temas escabrosos como nanotecnología, organismos genéticamente modificados y otros; en estos términos no es raro que la sorpresa venga de lo más simple, de lo esperado, de lo que no se nos hace posible pensar, de la existencia de otras culturas, de otros pueblos, de otras gentes movidas con un pensamiento diametralmente distinto al nuestro.
Pareciera que no hay nada que sorprenda ya a la actual sociedad globalizada de Occidente acostumbrada en su cotidianidad a temas escabrosos como nanotecnología, organismos genéticamente modificados y otros; en estos términos no es raro que la sorpresa venga de lo más simple, de lo esperado, de lo que no se nos hace posible pensar, de la existencia de otras culturas, de otros pueblos, de otras gentes movidas con un pensamiento diametralmente distinto al nuestro.

Leyes para acabar con la agricultura independiente

Es una ofensiva coordinada por grandes empresas transnacionales y grandes corporaciones, con la complicidad de los gobiernos del mundo, más el apoyo activo, fuerte y agresivo de una gran cantidad de organismos internacionales como los que ya conocemos todos: el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, la Organización para la Agricultura y Alimentación (FAO) y buena parte del aparato de Naciones Unidas, así como la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Es una ofensiva coordinada por grandes empresas transnacionales y grandes corporaciones, con la complicidad de los gobiernos del mundo, más el apoyo activo, fuerte y agresivo de una gran cantidad de organismos internacionales como los que ya conocemos todos: el Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo, la Organización para la Agricultura y Alimentación (FAO) y buena parte del aparato de Naciones Unidas, así como la Organización Mundial del Comercio (OMC).

Quién alimenta al mundo

Presentamos tres fragmentos de uno de los más recientes documentos de investigación del Grupo ETC, con atisbos y cifras del universo de personas, colectivos, comunidades, grupos, que reivindican el cultivar sus propios alimentos [en su sentido más vasto] en todo el mundo y que son muchos más de lo que luego suponemos. Campo y ciudad. Cultivo, recolección, animales de corral, pastoreo, caza y pesca. Este retrato contradice a una industria alimentaria que presume tener las soluciones para el hambre en el mundo. La edición es responsabilidad de Biodiversidad.
Presentamos tres fragmentos de uno de los más recientes documentos de investigación del Grupo ETC, con atisbos y cifras del universo de personas, colectivos, comunidades, grupos, que reivindican el cultivar sus propios alimentos [en su sentido más vasto] en todo el mundo y que son muchos más de lo que luego suponemos. Campo y ciudad. Cultivo, recolección, animales de corral, pastoreo, caza y pesca. Este retrato contradice a una industria alimentaria que presume tener las soluciones para el hambre en el mundo. La edición es responsabilidad de Biodiversidad.

La borrosa puerta de la ley

La crisis de legalidad no es sólo que la ley no se cumpla sino que la formulación de las normas sea tan sesgada que las comunidades y la gente común ya no puedan apelar a que la ley las proteja. La autonomía en los hechos es una constatación de esa negativa a confiar en un sistema jurídico que niega sistemáticamente a la mayoría. En ese escenario hay quienes todavía buscan quedar incluidos en las normas y que les reconozcan derechos: del agricultor, comunitarios, a la alimentación, a una vida digna, a un ambiente sano. Recuperamos voces diversas que con su propia versión intentan salir a flote de estas contradicciones.
La crisis de legalidad no es sólo que la ley no se cumpla sino que la formulación de las normas sea tan sesgada que las comunidades y la gente común ya no puedan apelar a que la ley las proteja. La autonomía en los hechos es una constatación de esa negativa a confiar en un sistema jurídico que niega sistemáticamente a la mayoría. En ese escenario hay quienes todavía buscan quedar incluidos en las normas y que les reconozcan derechos: del agricultor, comunitarios, a la alimentación, a una vida digna, a un ambiente sano. Recuperamos voces diversas que con su propia versión intentan salir a flote de estas contradicciones.

Herramientas para sembrar autonomía

Por toda América Latina es muy vasto, muy brutal, el ataque contra las comunidades campesinas e indígenas por parte de las industrias agroquímicas, de las grandes plantaciones de alimentos, mercancías de exportación, árboles o agrocombustibles; de las mineras, las petroleras, las madereras; de las empresas de manejo de agua, de manejo de basura; de las constructoras, las inmobiliarias y los narcotraficantes —junto con los gobiernos a nivel nacional, estatal y cantonal o municipal.
Por toda América Latina es muy vasto, muy brutal, el ataque contra las comunidades campesinas e indígenas por parte de las industrias agroquímicas, de las grandes plantaciones de alimentos, mercancías de exportación, árboles o agrocombustibles; de las mineras, las petroleras, las madereras; de las empresas de manejo de agua, de manejo de basura; de las constructoras, las inmobiliarias y los narcotraficantes —junto con los gobiernos a nivel nacional, estatal y cantonal o municipal.