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Río + 10: La gran traición

by Vandana Shiva | 24 Oct 2002

Río+10 LA GRAN TRAICION.
Porqué la sociedad civil se retiró de la Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sustentable.

por Vandana Shiva *


* Navdanya / Reserch Foundation for Science, Technology and Ecology
A - 60, Hauz Khas, New Delhi - 110016, India
C.e.: ,
Traducido por Alberto Villareal, del artículo publicado en inglés el 13 de setiembre de 2002. La versión completa de este trabajo titulado "The Great Betrayal. Why civil society walked and withdrew consent from W$$D" puede consultarse en www.vshiva.net

La Cumbre Mundial sobre Desarrollo Sustentable (CMDS), realizada en Johannesburgo desde el 26 de agosto al 4 de setiembre de 2002, supuestamente iba a ser la Cumbre de la Tierra II, diez años después de la primera Cumbre organizada en Río de Janeiro en 1992.

En lugar de ser Río+10, la CMDS se convirtió en realidad en Doha+101 . Hace 10 meses la conferencia de Doha fue realizada para salvar las negociaciones de la OMC tendientes a la realización de una nueva ronda amplia de negociaciones comerciales, que había fracasado en Seattle en 1999 debido a las protestas y la oposición ciudadanas, y el hecho de que algunos países pequeños -que habían sido marginalizados y excluidos- se retiraron de las negociaciones y no dieron su consentimiento a los acuerdos propuestos. El documento de implementación sobre la CMDS menciona esas negociaciones de Doha en 46 oportunidades, mientras que la Cumbre de la Tierra de Río solamente es nombrada en una oportunidad. El Proyecto del documento de implementación de la Cumbre había sido introducido de manera antidemocrática por los EE.UU. y la Unión Europea, y luego fue reintroducido por Sudáfrica con modificaciones muy menores. No hubo ninguna rebelión por parte de los gobiernos en contra de la sustitución subrepticia de la agenda de sustentabilidad de Río por la agenda comercial dominada por las transnacionales y sus intereses comerciales en la OMC.

Mientras las luchas de los pobres del Sur están vinculadas al acceso y sus derechos sobre los recursos naturales -agua, tierra y biodiversidad-, y por tanto son intrínsecamente luchas ecológicas y ambientales, la CMDS fue presentada artificialmente como si se tratara acerca de la "pobreza", pero no sobre "el medio ambiente". Entonces, la globalización fue presentada como la solución a la pobreza, y las decisiones estuvieron orientadas a quitarle a los pobres los recursos que les quedan -por lo tanto haciéndolos más pobres aún, como por ejemplo a través de la privatización del agua, el patentamiento de las semillas y el despojo de la tierra-, y fueron ofrecidas como medidas para "mitigar la pobreza". Los campesinos sin tierra y los movimientos contra la privatización se manifestaron en las calles a favor de sus derechos ambientales, y los promotores de la globalización del capital no hacían otra cosa que seguir repitiendo su "mantra" de que los pobres no pueden darse "el lujo" de tener su propio capital natural, que necesitan la globalización. Estos globalizadores se niegan a ver que la globalización despoja a los pobres de sus recursos, convirtiendo estos recursos en propiedad de las grandes transnacionales, que luego venden el agua y la semilla a altos costos a los pobres, y por lo tanto los empujan a situaciones de mayor pobreza, llegando incluso al límite de la supervivencia. Durante un debate radial y televisivo en el que participé, un vocero de las empresas expresó muy claramente que la imposición de derechos de propiedad privada sobre los recursos naturales era la primera prioridad. La agenda principal de la CMDS era la globalización de los no-sustentables, no éticos, e inequitativos sistemas de propiedad, y el control y uso de los recursos naturales.

Las grandes empresas transnacionales secuestraron la Segunda Cumbre Mundial de la Tierra y la convirtieron en la "Cumbre de los Dólares"2 .

Pero las consecuencias de todo esto van mucho más allá del simple secuestro de una Cumbre. Son indicativas de tendencias muy peligrosas para la democracia. La sustitución de acuerdos multilaterales vinculantes (Tipo I) entre los estados, por los acuerdos llamados Tipo II (que serían entre agentes privados y agentes públicos) no son más que el reflejo de la privatización de los estados y la privatización de las Naciones Unidas. Aquellas Naciones Unidas originarias, que empezaban diciendo "nosotros, los pueblos...", se transformaron en Johannesburgo en unas Naciones Unidas cuyo encabezamiento dice "nosotros, las grandes empresas...". Eso parecía una casa de remates, donde el planeta Tierra, como tal, estaba puesto a la venta. Para nosotros, participantes y miembros de la sociedad civil, la Tierra y el Mundo no están en venta. Por eso es que no dimos nuestro consentimiento a los resultados de la Conferencia.

La prensa y los medios -en incluso algunas organizaciones- han reclamado "victorias pírricas" en Johannesburgo, como por ejemplo, que los gobiernos se hayan comprometido a reducir las necesidades de agua y saneamiento a la mitad para el año 2015, como ya lo habían hecho con el hambre en la FAO años atrás. Lo trágico de estas supuestas victorias es que simplemente consiguieron prevenir daños mayores en términos de lo que sea el control y la regulación de las empresas, los acuerdos ambientales multilaterales y los derechos reproductivos de la mujer y de salud de la población.

Los gobiernos, en lugar de comprometerse a conservar el agua y defender y respetar los derechos al agua de todos sus ciudadanos se limitaron a poner a la venta el agua -en acuerdos Tipo II, privatizadores- a pesar de que el agua no es propiedad del Estado, sino que es un bien común cuidado y compartido por las comunidades. La privatización de ese bien común que es el agua es ilegal, desde el punto de vista de la ley natural y la ley moral. Por esto es que existieron grandes protestas en contra de la privatización del agua a lo largo de la "Cumbre de los Dólares".

La degradación moral de las élites gobernantes también se hizo evidente en la privatización de la vida a través de la biotecnología y las patentes. La región de Africa del Sur ha sido víctima de las sequías y las hambrunas debido al impacto conjunto del cambio climático y los programas de ajuste estructural. El Banco Mundial ha obligado a los países a destruir y desmantelar sus programas de seguridad alimentaria. Enfrentados con severas sequías, la falta de seguridad alimentaria está creando condiciones para la existencia de nuevas hambrunas.

La Cumbre Mundial de 2002 en Johannesburgo, organizada 10 años después de la Cumbrie de Río que estableció el Covenio de Diversidad Biológica y el Protocolo de Bioseguridad, también fue escenario mercantil para forzar la entrada de la biotecnología en Africa. Cientos de agricultores y campesinos y representantes gubernamentales africanos condenaron la presión de los EE.UU para forzar la utilización de alimentos contaminados genéticamente a través de la ayuda alimentaria. Tal como expresaron representantes africanos, "nosotros, representantes de grupos de la Sociedad Civil Africana de más de 45 países, unimos nuestras manos con los gobiernos de Zambia y Zimbabwe y sus pueblos, que rechazan los alimentos transgénicos para nuestros hermanos y hermanas que pasan hambre".

De hecho, no hubo una Cumbre sino varias. Una, fue la cumbre secuestrada -realizada en Sandton, el suburbio más rico de Johannesburgo-. Para acceder al Centro de Convenciones nosotros teníamos que pasar por un gran centro comercial; era un símbolo apropiado para una Cumbre que se había convertido en un mercado de los recursos naturales del planeta. En una reunión paraoficial de ONG's reunidas en un lugar denominado Nasrec, y en la escuela St. Stithians, se realizó la Cumbre Mundial de los Pueblos; y en Soweto, los niños también realizaron la Cumbre Mundial de los Niños. La gente sin tierra y los pequeños campesinos tuvieron sus propias Cumbres. Las Cumbres alternativas fueron planificando una agenda para el futuro centrada en la gente y en la tierra. En el centro de tanta corrupción, ellos estaban generando coraje y verdad. En el medio de tanta desesperanza, ellos estaban generando esperanza. En el medio de tanta violencia, estaban generando no-violencia.

Cuando como sociedad civil nos retiramos del proceso oficial el 4 de setiembre y retiramos nuestro consentimiento a las propuestas oficiales en curso, lo hicimos en paz, con confianza y con alegría. Fuimos brutalmente asaltados por la policía de la era del "apartheid". Entonces recordamos a Ghandi -que también fue asaltado en otro 11 de setiembre-, que en lugar de responder con violencia a la violencia conceptualizó la no-violencia como el último poder de los débiles y excluidos. Su "Satyagraha" -la "fuerza de la verdad"- fue una repuesta diferente a la de los eventos de setiembre 11 de 2001. Su Satygraha es nuestra inspiración.

El 4 de setiembre, cuando no nos consideramos más asociados con esta Cumbre, emitimos un comunicado conjunto como sociedad civil manifestando nuestra gran preocupación con los resultados de la CMDS; pero también fue una declaración de nuestra determinación y compromiso. En ella se establecía: "Nosotros celebramos nuestra decisión común para fortalecer la diversidad de las culturas humanas y la integridad del planeta Tierra. Afirmanos y reafirmamos que otro mundo es posible".

Y nosotros, todos, haremos que ello suceda.

 

[1]

Nota del Editor: Capital de Qatar, en la península arábica, donde se realizó la última Conferencia Ministerial de la Organización Mundial de Comercio,

[2]

Nota del Editor: En inglés la Cumbre Mundial de Desarrollo Sustentable se escribe "World Summit on Sustainable Development" y se abrevia WSSD. Por ello, en el texto original en inglés se hace referencia a que la WSSD mutó y se transformó en "W$$D".

Author: Vandana Shiva
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