https://grain.org/e/727

Indonesia lucha por cambiar las normas de la OMS sobre las vacunas contra la gripe

by Edward Hammond | 17 Apr 2009

El sistema de vigilancia global de la Organización Mundial de la Salud (OMS), actúa como colección gratuita de virus y como departamento de investigación y desarrollo para los fabricantes de vacunas más grandes del mundo y, no obstante, brinda muy pocos beneficios a los países en desarrollo que tienen muy disponibilidad de estas vacunas. Ante tal inequidad, en 2007 Indonesia decidió dejar de compartir muestras de virus con la OMS. Su acción conmocionó a todo el mundo y alertó a muchos países en desarrollo sobre la necesidad de reformas profundas, y provocó que las grandes compañías y los países desarrollados lucharan por mantener el estatus quo. Aún no se conoce en qué terminará ese asunto, pero el mundo espera una nueva pandemia.

Edward Hammond

A mediados de 2005, Indonesia comenzó a sospechar que algo andaba muy mal en el sistema que investiga el virus de la gripe [o influenza] de la Organización Mundial de la Salud (OMS). En julio de ese año, una nueva y virulenta cepa de la “gripe aviar”, H5N1, afloró en ese país infectando aves de corral y, peor aún, a personas. [1] El mundo observó a Indonesia con miedo a que el virus empezara a trasmitirse entre humanos (y no sólo de aves a humanos) lo que potencialmente podría provocar una pandemia.

A fines de 2005, conforme el nuevo tipo de virus [en realidad un clado, como se le dice en biología, un nuevo grupo que comparte rasgos a partir de un ancestro común] infectaba las aves de corral y varias personas infectadas morían en los hospitales de Indonesia, las autoridades se apresuraron a responder a esta crisis sin precedentes. Diversos brotes se habían producido anteriormente en otras partes del sudeste asiático, y las autoridades también lucharon (y siguen luchando) por contenerlos.

Los autoridades indonesias de salud se enfrentaron con algunos problemas inquietantes. El Tamiflu, una droga antiviral fabricada por Roche en Suiza, no estaba disponible en grandes cantidades, a ningún precio.[2] Aunque a partir de entonces disminuyó la importancia del Tamiflu, en ese momento se le consideraba fundamental para tratar y contener la infección en humanos. Pero los países ricos bloquearon el suministro aunque allá no hubiera brotes del virus H5N1.

Además de lo difícil que fue conseguir los fármacos, las autoridades de salud y agricultura de Indonesia recibieron del exterior frecuentes críticas por su modo de trabajo para acabar con la infección.[3] Muchos críticos extranjeros fueron un tanto injustos y sus comentarios los hicieron con muy poco (o nulo) conocimiento de las condiciones que privan en Indonesia. A menudo, sus críticas se basaban en fuentes de dudosa confiabilidad: por ejemplo, noticias escritas en idioma bahasa traducidas mediante comandos automáticos por computadora a un inglés casi ininteligible y lleno de los errores.[4]

Otra fuente fue el australiano Andrew Jeremijenko, un médico general resentido que trabajaba entonces en Indonesia. Jeremijenko fue empleado de la industria petrolera en Indonesia y trabajaba al mismo tiempo en un laboratorio militar estadounidense en Jakarta conocido como NAMRU-2, que fue cerrado por las autoridades indonesias a fines de 2008 (ver Recuadro 1)

Su relación laboral con el laboratorio militar estadounidense terminó desde principios del 2006, en parte por fricciones con el Ministerio de Salud de Indonesia a propósito del manejo de muestras de H5N1. De regreso a su país se convirtió en empresario de la telemedicina (y fue candidato político local en un suburbio de Brisbane en 2006-2007), por lo que fue frecuente que las críticas de Jeremijenko al gobierno indonesio fueran aceptadas sin más por los medios de comunicación y por los comentaristas de salud pública en los países del Norte.[5]

Pese a las críticas, y como ha sido habitual por más de cuarenta años, Indonesia compartió el virus H5N1 que obtuvo de sus víctimas con la Red Global de Vigilancia de Influenza de la OMS (GISN, por sus siglas en inglés).  Como es costumbre también, los virus se compartían sin acuerdo alguno de transferencia de materiales u otro documento que especificara derechos sobre ellos.

Al poco tiempo, un virus indonesio procedente del brote del año 2005 fue seleccionado por el sistema de vigilancia de la OMS para usarlo en vacunas. Esto causó malestar en Indonesia: aunque el virus lo enviaron los laboratorios de la OMS a las empresas y otros investigadores, la vacuna fabricada a partir de éste no estaría a disposición de los indonesios.[6] El descontento creció en Indonesia cuando salieron a la luz las solicitudes de patente sobre éste y otros virus H5N1.

Cómo se llegó a un sistema global de vigilancia de la OMS que actúa como recolector gratuito y como departamento de investigación y desarrollo para las compañías fabricantes de vacunas más grandes del mundo, con nombres conocidos como Sanofi-Pasteur, Novartis y Astra-Zeneca, y sin embargo favorece tan poco a los países en desarrollo.

Una aspiradora mundial del virus

El Sistema Global de Vigilancia de Influenza es la red de laboratorios de la OMS que hacen investigación sobre los virus de la influenza.[7]Su papel es identificar y caracterizar dichos virus y crear y distribuir material reproductivo de cepas de virus que puedan ser usadas para producir vacunas. Los laboratorios clave del sistema, llamados Centros de Colaboración con la OMS, están localizados en países ricos —Japón, EUA, Gran Bretaña y Australia. De éstos, las instalaciones dominantes son los Centros para el Control de y Prevención Enfermedades, cuya sede principal está en Atlanta, y pertenecen al Departamento de Salud y Servicios Humanos estadounidense, cuyas competencias técnicas superan claramente a las de los otros.

Aunque en teoría el sistema de vigilancia existe como un ente de colaboración internacional en salud publica encabezado por la OMS, en muchos aspectos se puede describir mejor como una aspiradora de virus, que adquiere y procesa miles de muestras de influenza cada año; determina cuáles de ellos son más apropiados para usarse en vacunas, y entrega estas cepas a la industria en forma gratuita, concentrada en un 90% en los países industrializados.

Aunque la industria es el principal beneficiario de este sistema de vigilancia, ésta no le agradece a los países como Indonesia que le proporcionen virus, sino como un mercado más. Y ya que en una pandemia de influenza la demanda de vacunas superará con creces la capacidad de producción, la industria tiene poco interés en hacer contratos a precios asequibles para brindarle vacunas a los países en desarrollo. Esta falta de interés existe aunque los países ricos, donde se produce la gran mayoría de los antígenos para vacunas, permitieran la exportación de vacunas en caso de una crisis mundial de influenza (lo que muchos observadores consideran dudoso).

Para la industria lo mejor es que al circular  los virus de influenza (y otros virus) a nivel internacional dentro del sistema OMS, se ha ignorado históricamente el concepto de soberanía sobre los recursos genéticos y la distribución equitativa de los beneficios derivados de ellos. De esta forma, el sistema de la OMS no tiene protección alguna contra las solicitudes de patente de las empresas, ni los Términos de Referencia y otros acuerdos que norman su operación reflejan un compromiso significativo con la equidad y la distribución de los beneficios.[8]

El resultado es que aunque Indonesia y otros países cooperaron con los laboratorios del sistema de vigilancia de la influenza aprobados por la OMS y firmaron los Términos de Referencia, perdieron todos los derechos legales sobre los virus enviados al sistema de vigilancia de la OMS. Las tensiones aumentaron cuando, más tarde, se prestó atención a la cantidad de solicitudes de patentes presentadas sobre el virus H5N1 que circulaba en dicho sistema de vigilancia (ver más abajo). El hecho que algunas de las solicitudes las hubieran presentado los mismos laboratorios del sistema de vigilancia de la OMS[9] empeoró las cosas y mostró la falta de interés de la OMS por prevenir que los intereses privados se apoderen de bienes de salud pública.

Indonesia en el banquillo de los acusados

Hasta 2007, la aspiradora de virus de la OMS había funcionado por cuarenta años con muy pocas objeciones. Sin embargo, el temor de una nueva pandemia provocó que la atención se centrara en la influenza lo que hizo evidente la inequidad del sistema de vigilancia. Molesto por las críticas, hace poco un alto funcionario de la OMS se lamentaba en privado diciendo: “antes nadie se preocupaba de la influenza”. Su comentario sugiere —con algo de razón— que parte de la responsabilidad proviene de la histórica falta de preocupación de los Estados miembros de la OMS.[10]

En 2007 los países en vías de desarrollo casi no podían acceder a los tratamientos contra el H5N1, y la Secretaría de la OMS seguía afectada por las revelaciones de que su sistema de vigilancia era inequitativo. En ese momento Indonesia suspendió sus donaciones de virus a la OMS y se presentó en la Asamblea Mundial de Salud en Ginebra decidida a hacer grandes cambios en el sistema de la OMS.[11]

 La suspensión de las donaciones de virus por parte de Indonesia fue un golpe para la comunidad científica internacional y para los fabricantes de vacunas. Sin acceso a los virus de Indonesia, la investigación y desarrollo de la vacuna para el H5N1 en los países industrializados se vería seriamente dañada. Indonesia se opuso también al patentamiento de los materiales del sistema de vigilancia, lo que causó preocupación en  la industria y otros laboratorios que consideraban que los recursos del sistema de vigilancia eran de libre apropiación.

La suspensión produjo otra ola de crítica internacional incluyendo la de la OMS, quien acusó duramente a Indonesia de “amenazar la salud pública mundial”. [12]Ésta y otras críticas fueron publicadas en los medios noticiosos y en el internet. Sin embargo, pocos de esos críticos sabían qué era el sistema de vigilancia y, menos aún, cómo operaba.

Esta ignorancia del sistema de vigilancia y de la problemática de la propiedad intelectual, se mezcló produciendo una distorsionada espiral de comentarios cruzados entre la prensa y quienes participan en los blogs electrónicos, lo que provocó que varios artículos indicaran erróneamente que Indonesia exigía la propiedad intelectual sobre los virus y que esto interfería con la labor de salud pública del sistema de vigilancia.[13] La realidad era otra totalmente. Indonesia no había reclamado propiedad intelectual sobre ningún virus. Repudiaba que se lucrara con los virus. Y expresó su rechazo a que la OMS permitiera patentar materiales del sistema de vigilancia.

La determinación de Indonesia de cambiar el sistema de vigilancia tomó por sorpresa a muchos países desarrollados. Desde la Asamblea Mundial de Salud de 2007 se han llevado a cabo varias reuniones de la OMS, pero aún no llegan a un acuerdo que solucione el problema. Cuando quedó claro que Jakarta no quedaría satisfecha con sólo protestar para luego continuar entregando virus como de costumbre, los países desarrollados colocaron una serie de obstáculos (muchos aún no resueltos), a que  se reforme o se sustituya el sistema de vigilancia para hacerlo más justo en su trato con los países en desarrollo.

Al principio EUA se negó a que fuera obligatorio manejar los virus mediante un acuerdo de transferencia de materiales. Los negociadores estadounidenses dijeron que esto podría ser muy oneroso, pese a que en EUA, los virus de influenza son manejados por rutina mediante  acuerdos de transferencia muy detallados, incluso cuando se comparten entre agencias gubernamentales.

EUA y otros países enredaron el lenguaje propio del reparto de beneficios cuando se colaba en los borradores de las resoluciones sustituyendo, por ejemplo, “acceso a recursos genéticos [los virus] y reparto de los beneficios que de ellos se originen” por “donación obligatoria de virus a cambio de acceso a vacunas a través de los mecanismos regulares de mercado”.[14] En otras palabras, el estatus quo se defendió rechazando cualquier sugerencia de inequidad en el sistema de vigilancia.

Con el apoyo de la Unión Europea, EUA también ha promovido la idea de que la nueva versión del  Reglamento Sanitario Internacional (RSI) debe exigirle a Indonesia el envío de virus a la OMS. Según esta versión, Indonesia habría estado violando un convenio internacional al no enviar virus al sistema de vigilancia. Pero es difícil sostener este dudoso argumento, sobre todo porque el RSI revisado no obliga a compartir los agentes de enfermedades. ¡De hecho, una cláusula propuesta que podría haberlo hecho fue descartada debido a objeciones de EUA!

Para descrédito de la OMS, su Asesor Legal se niega a ponerle fin a la incertidumbre creada por EUA y la Unión Europea en relación al RSI. Es sólo de mala gana que la OMS reconoce que en el RSI no existe per se ninguna exigencia de  compartir los virus. Pero al hacerlo, invariablemente insiste en sugerir varias maneras simultáneas de reinterpretar el RSI para exigir la donación de virus, perpetuando así la confusión sobre las exigencias realmente vigentes. Queda la impresión de que la OMS está politiqueando en su favor. Que alienta a los Estados miembros a concederle el poder de obligar a los países a enviarle virus, bacterias y otros agentes patógenos.

Una pandemia de patentes

Desde 2007, investigaciones realizadas por ONG han documentado un dramático aumento en las patentes sobre vacunas contra la influenza, especialmente para la H5N1. Esto incluye las solicitudes de patentes sobre materiales que circulan en el sistema de vigilancia de la OMS —entregados por países como Indonesia, Tailandia y Vietnam. Las peticiones no sólo fueron hechas por la industria privada; también dos Centros Colaboradores de la OMS para la influenza hicieron solicitudes: el sistema de Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC por sus siglas en inglés) y el St Jude’s Children’s Research Hospital —ambos estadounidenses.

El 31 de julio de 2007, la OMS organizó precipitadamente una consulta en Singapur, apenas unas cuantas semanas después de la Asamblea Mundial de la Salud. Aunque a nivel privado uno de los funcionarios de la OMS describió la reunión de Singapur como un intento de “emboscar” a los negociadores indonesios, la emboscada resultó un tiro por la culata cuando Indonesia puso en la mesa una detallada propuesta para reestructurar el sistema de vigilancia de la OMS, que incluía acuerdos de transferencia de materiales, mejoras en el acceso a vacunas, y nuevos términos de referencia para normar las relaciones entre la OMS, los laboratorios del sistema de vigilancia, la industria y los países en desarrollo.

La Secretaría de la OMS propuso un “Texto de la Presidencia” que intentó quitarle toda la fuerza a la propuesta de Indonesia, de muy dudosa procedencia.[15]El texto reflejaba sobre todo la posición de EUA y la Unión Europea, aunque no haya sido introducido por esos países sino que simplemente apareció sin explicación. No es sorprendente que los avances en Singapur hayan sido dificultosos. Los países desarrollados no iban preparados para negociar en detalle, y parecería que simplemente fueron a presionar a Indonesia para que retirara su iniciativa. Las sesiones de negociación que siguieron, conducidas por el ministro de Salud de Australia, maquillaron y reformularon este proyecto de acuerdo.


H5N1 patents graphs

Antes de 2006, sólo una solicitud de patente internacional para una vacuna de influenza había sido presentada con el término H5N1 en la solicitud. En 2006, hubo cinco peticiones. En 2007, fueron once y, hasta septiembre de 2008, siete. Casi todas las peticiones provenían de empresas estadounidenses y de la Unión Europea

(Fuente: OMPI/Patent Scope)


No fue sino hasta fines de 2007 que aparecieron signos de progreso. EUA cedió a un acuerdo de transferencia de materiales (acuerdo al que bautizó como “términos y condiciones estándares”), y la OMS empezó a despertar a la moderna realidad de los recursos genéticos.  Al final de una áspera sesión de negociaciones de una reunión integubernamental en Ginebra, la directora general de la OMS, Margaret Chan, confesó a los delegados que anteriormente no había entendido la posición de Indonesia y sus aliados, pero que después de escuchar las negociaciones, había “llegado a comprender lo que se quiere decir cuando se habla de reparto equitativo de beneficios”

Los detalles, sin embargo, son de la mayor importancia. Habiendo pactado la necesidad de acuerdos de transferencia de materiales para los materiales biológicos del sistema de vigilancia de la OMS, la definición de estos materiales biológicos en las reuniones intergubernamentales se torna crucial.

El virus de la influenza es muy pequeño. Su genoma tiene unas 12 500 bases genéticas, más o menos una cincuentava parte del tamaño de la bacteria más pequeña y, una fracción muchísimo menor que la de un organismo superior. Los genes HA (hemaglutinina) y NA (neuroaminidasa), que son los de mayor interés para las vacunas, tienen más o menos 1 750 y 1 350 bases, respectivamente.[16]

El tamaño pequeño acoplado a una tecnología de ingeniería viral llamada genética reversa permite que la síntesis en laboratorio de los genes de la influenza y la reproducción industrial de los virus sea cada vez más fácil de lograr. La nueva tecnología también permite que los virus sean relativamente fáciles de manipular a nivel genético. Más aún, hay aspectos técnicos en el desarrollo de la vacuna H5N1 que estimulan la manipulación genética de las cepas de vacunas. Un efecto es que aunque las compañías siguen dependiendo por completo de la OMS para obtener la información relativa a las secuencias, adquirir virus del sistema de vigilancia global cada vez es menos necesario, ya que los laboratorios son cada vez más capaces de sintetizar virus y genes de la influenza a partir de las secuencias publicadas.

De esta forma, si la definición de qué es un material del sistema de vigilancia de la OMS excluye las copias sintéticas y los virus ligeramente alterados, las empresas pueden evadir las exigencias de los acuerdos de transferencia (restricciones a las patentes y  reparto de beneficios, e incluso disponibilidad gratuita de tecnología para fabricar vacunas o las contribuciones obligatorias a un fondo para financiar los preparativos para enfrentar pandemias en los países en desarrollo).

Cuadro 1: Los militares estadounidenses y las muestras de influenza

El laboratorio militar de EUA en Jakarta, la Unidad de Investigación Médica Naval # 2 (NAMRU-2, por sus siglas en inglés), es parte de una enorme red, muy poco conocida, de laboratorios militares estadounidenses que realizan investigación biomédica y colectan muestras de enfermedades fuera de EUA. En el caso de la influenza el sistema militar estadounidense es semejante al sistema de vigilancia de la OMS pero no comparte del todo sus propósitos de salud pública.

Desde 2007, el ejército estadounidense colecta virus de influenza en por lo menos 56 países. Las muestras son enviadas a EUA, y sólo algunas se envían al sistema de vigilancia de la OMS. En 2006, se enviaron 120 virus (cerca de 1.5% de lo colectado), lo que implica que más de 98% no ingresa al sistema OMS. El ejército de Estados Unidos mantiene todo lo colectado para sus propios fines.

Sin embargo, el Pentágono asegura ser la fuente de varios virus de influenza importantes, los cuales fueron seleccionados por la OMS para usarse en vacunas contra la influenza estacional y la H5N1, desde 2000 en adelante. Estos incluyen virus de Panamá, Perú, Nepal, Malasia e Indonesia.

Los países desarrollados, incluido EUA, han insistido en que los países en desarrollo sólo pueden compartir virus con el sistema de vigilancia y que no pueden hacerlo de país a país. Sin embargo, el programa militar estadounidense de recolección masiva de virus, contradictoriamente, sólo entrega a la OMS un pequeño porcentaje de lo que recolecta.

En los últimos años dicho programa aumentó su tamaño a más del doble. En 2005, estaba activo en 30 países e incluía tres laboratorios de contención (BSL-3) con una capacidad de procesamiento de 9 mil especímenes de influenza al año. Hacia 2007, la red seguía activa en 65 países e incluía ocho laboratorios BSL-3 con una capacidad de procesamiento anual de 18 mil muestras.

No quedan claras las condiciones ni las formas en que un acuerdo de transferencia de materiales del sistema de vigilancia global de la OMS podría ser aplicable a los virus colectados por los militares estadounidenses en otros países, ya que estos virus son obtenidos y transferidos en forma externa a lo que se entiende por sistema de la OMS.

Un laboratorio de la Fuerza Aérea estadounidense en San Antonio, Texas, coordina las colecciones. En 2006 y 2007 el presupuesto de todo el sistema era de más de 40 millones de dólares anuales. Los virus colectados  (en especial los virus H5N1) se le proporcionan al US Army Medical Research Institute of Infectious Diseases (el instituto de investigaciones médicas sobre enfermedades infecciosas de la Armada estadounidense, conocido por sus siglas en inglés, USAMRIID, situado en Fort Detrick, en Frederick, Maryland. El citado instituto es la sede histórica del programa de armas biológicas ofensivas de Estados Unidos (que terminó en 1969), y es ahora el cuartel general del proyecto de defensa militar biológica estadounidense.

Según el laboratorio de San Antonio, “El principal objetivo es posibilitar el rápido descubrimiento de nuevas mutaciones en las cepas que pudieran disparar una pandemia y vigilar estas cepas en cuanto a su capacidad para transmitir y provocar enfermedades… la prioridad del Departamento de Defensa es mantener una prontitud de respuesta, y proteger la salud de los miembros de servicio y de los beneficiarios. Las contribuciones del programa de vigilancia también benefician la salud de la gran comunidad global”.

Son cinco los laboratorios que en diversas partes del mundo operan como centros de coordinación regionales bajo la dirección del Departamento de Defensa estadounidense:

* Unidad de Investigación Médica Naval #2 (NAMRU-2) en Jakarta

* Unidad de Investigación Médica Naval #3 (NAMRU-3) en El Cairo

* Destacamento del Centro de Investigación Médica Naval (NMRCD) en Lima

* Instituto de Investigación en Ciencias Médicas de las Fuerzas Armadas (AFRIMS) en Bangkok

* Unidad de Investigación Médica Naval-Kenya (USAMRU-K) en Nairobi

A excepción del NAMRU-2, que fue cerrado recientemente por Indonesia, cada uno de los laboratorios arriba mencionados trabaja no sólo en el país donde tiene su sede sino en los países aledaños, donde se sitúan algunas veces los destacamentos, el personal militar o de los laboratorios.

Aunque los virus del Pentágono han contribuido con frecuencia  a la selección de cepas utilizadas en vacunas, ninguno de los textos de negociación ni los documentos de contexto que ha puesto a disposición pública la OMS en el curso de las negociaciones relativas a su sistema global de vigilancia entran en la discusión del sistema militar de colecta de virus, y mucho menos explican la inusual relación entre este sistema y el sistema global de vigilancia.

Ahora, la OMS espera —en forma optimista— que un acuerdo para modificar o reemplazar el sistema de vigilancia, hoy conocido como “marco de referencia de la OMS”, pueda completarse y para ser adoptado en la Asamblea Mundial de la Salud de Mayo de 2009. Sin embargo, el actual borrador, pese a todas las reuniones y versiones sucesivas del documento, deja muchos puntos clave sin resolver incluidas las restricciones a la propiedad intelectual, las definiciones de qué es un material OMS, los tipos y requisitos exactos para el reparto de beneficios.

El alcance del acuerdo también continúa en discusión. La OMS y los países desarrollados han luchado por restringirlo a los virus aislados en humanos. Esto, pese a que las vacunas para humanos seleccionadas por la OMS son también fabricadas a partir de virus H5N1 que provienen de animales, lo que implica que cualquier acuerdo que sólo se aplique a virus aislados desde humanos será de escasa utilidad. Además, durante años la OMS ha solicitado a sus Estados Miembros que envíen virus animales al sistema global de vigilancia (un hecho que los funcionarios de la OMS olvidaron penosamente en un importante momento de la negociación). De hecho, uno de los centros colaboradores de la OMS, el hospital de investigación St. Jude en Memphis, Tenessee (EUA), se especializa en coleccionar y evaluar influenza en animales.

Si bien se ha sostenido que  extender el acuerdo de la OMS para incluir virus animales implica conflicto con el ámbito de operación de otras organizaciones intergubernamentales (FAO y OIE), de hecho, esto no parece ser mayor problema, porque es posible distinguir entre el uso de muestras para desarrollar vacunas humanas, evaluando los riesgos de una pandemia, y los usos que se centran en la salud animal.

Cuadro 2: Gripe aviar en Indonesia y Vietnam

Indonesia y Vietnam son los dos países del sudeste asiático más afectados por la continua crisis de gripe aviar. En julio de 2008, GRAIN se reunió con algunos pequeños avicultores y con personas dedicadas al desarrollo de políticas que lidian con la enfermedad. En ambos países la situación es muy preocupante. Las autoridades están usando la gripe aviar como pretexto para destruir un sistema alimentario altamente eficiente, construido a través de generaciones. Este sistema entrega sustento a millones de personas, de pequeños agricultores a carniceros de mercados locales. Es completamente sustentable y de forma confiable provee de alimentos asequibles y nutritivos a poblaciones urbanas y rurales.  Ahora, sobre las cenizas de la cultura avícola ricamente diversa de Asia, las grandes corporaciones avícolas están erigiendo sus modernas fábricas.

Indonesia ha sufrido más que ningún otro país debido a la gripe aviar. A través del archipiélago se han implementado muchos programas y políticas, tanto locales como internacionales, para enfrentar la enfermedad. Pero prácticamente nada se ha hecho para enfrentar a las grandes compañías avícolas, que son las responsables de la introducción y propagación de la enfermedad. El doctor Muladno, coordinador de planificación y desarrollo del comité nacional para controlar la influenza aviar y responder a la influenza pandémica de Indonesia, (National Committee on Avian Influenza Control and Pandemic Influenza Preparedness) (Komnas FBPI), señaló a GRAIN que el gobierno está en conocimiento de brotes en grandes granjas, aunque ellos no han sido informados, y mencionó la existencia, en ese momento, de un brote específico en una gran granja en Subang, del que no se hablaba. Aún no hay normas legales que obliguen a las empresas a informar de los brotes de gripe aviar en sus planteles, y los inspectores de sanidad no tiene respaldo legal para ingresar a las granjas industriales sin el permiso de sus dueños.

Sin embargo, las políticas gubernamentales han tenido un devastador impacto en los planteles de aves de corral en pequeña escala. Muladno dice que un 90 por ciento de los pollos locales de Jakarta fueron sacrificados y nunca los reemplazaron debido a la prohibición de la producción avícola dentro de la ciudad. Todo esto para qué. Las medidas no tuvieron el efecto que se buscaba, es decir la reducción de los casos de H5N1 en humanos dentro de Jakarta. La ciudad continúa siendo un lugar propenso a las infecciones de humanos con gripe aviar: cerca de 70 por ciento de los casos en humanos ocurrieron en la región de Jakarta. Es obvio por lo tanto que la infección la trajeron de planteles avícolas de otros lados del país. Para lidiar con esto, el gobierno se sumergió en una segunda ronda de políticas públicas que prohibirán el transporte de aves de corral, vivas, a la ciudad, y no levantará la prohibición a la producción avícola dentro de la ciudad. Prohibir el transporte pondrá un fin inmediato a más de 1 300 rastros tradicionales en la ciudad, que abastecen 80 por ciento de la carne de ave que se consume en Jakarta y que da sustento a miles de carniceros en pequeño. Toda la carne de pollo tendrá que ser enviada a la ciudad desde unas cuantas enormes granjas que pueden pagar la infraestructura fabril que pronto será requisito.

La misma suerte le espera a los granjeros medianos que se dedican a las operaciones avícolas. Estas granjas tienen unas dos mil aves, y con frecuencia operan bajo contrato con compañías más grandes. Muladno afirma que o crecen, junto con los necesarios requerimientos de “bioseguridad”, o “mueren”. Esto significa que los granjeros se endeudarán para poder entrarle a las grandes operaciones por contrato con las grandes compañías, o saldrán del negocio. Muladno dice que cerca de un 90 por ciento de estos granjeros medianos se saldrán del negocio.

La única voz de los granjeros avícolas en pequeños en Komnas FPBI es Ade M Zulkarnain, un pequeño productor de Sukabumi, al oeste de Java. Ade es el representante de la comunidad Indonesia de pollos nativos (Indonesian Native Chicken Community, o Keprak), que se formó en 2003 y que junta ahora a 1 800 granjeros de 22 provincias de las 33 existentes. Es también el “padre fundador” y miembro activo de la asociación indonesia de productores avícolas locales (Local Poultry Farmers Association, o HIMPULI), formada en 2007 para ayudar a los avicultores a mejorar su trabajo y su forma de vida.

La granja avícola de Ade se asienta en una comunidad densamente poblada, y fue aquí, en julio de 2005 que se reportó el primer brote de gripe aviar H5N1 entre los pollos kampung o de rancho, locales. Ade afirma que una persona y 2 200 pollos kampung murieron durante el brote (850 de los cuales fueron sacrificados por le gobierno). Él sospecha que la gripe aviar llegó a la comunidad a través del pienso industrial o de algunas personas que trabajaban en los planteles industriales. Desde entonces, no ha habido ningún otro brote, aunque el área se considera un sitio candente en relación con la gripe aviar. Ade agregó que existe una zona aledaña de grandes granjas avícolas, donde 500 mil pollos murieron recientemente en un brote de gripe aviar que el gobierno no reportó, y los medios tampoco. Dijo que la compañía no permitió siquiera que los inspectores del gobierno entraran a las instalaciones.

Ade cría varias variedades de pollos kampung poco comunes. Según cuenta, Indonesia es el sitio de origen de dos de los cuatro ancestros originales de las gallinas. Estas variedades se diversificaron después a 31,  siendo Indonesia el lugar con la mayor diversidad avícola del mundo. Pero la industrialización de la producción de aves y la respuesta ante la gripe aviar, especialmente el sacrificio de los animales, redujo esta diversidad hasta que quedaron únicamente unas diez variedades. Ade siente que la política gubernamental de sacrificar a los animales, definida por un decreto presidencial de 2007, es un intento deliberado de arrasar con los pollos kampung.

Su grupo y su comunidad ya habían tomado la iniciativa de “reestructurar” la producción avícola local antes de que el gobierno lo pidiera. la comunidad se juntó a compartir ideas, invertir colectivamente en maquinaria simple (molinos de alimento e incubadoras caseras), para establecer un manejo conjunto de corrales de pollos y vacunaciones. Sus acciones colectivas les permitieron compartir los costos, los recursos y los saberse, además de desarrollar mercados. Ade siente que tales iniciativas deberían seguir surgiendo de la gente y que el gobierno debería reconocerles sus esfuerzos y brindarles apoyo. en cambio, el gobierno le pone trabas a todo lo que ellos proponen, se rehúsa a escuchar o hace promesas que nunca cumple. Por ejemplo, el gobierno tiene listo un decreto que salvaguarda el control de los avicultores pequeños sobre los pollos kampung. pero en 2006, Charlen Pokphand (CP), la compañía avícola más grande de Asia, comenzó a involucrarse en producir y comercializar su propia marca de pollo “kampung”, producido en enorme fábricas. El grupo de Ade se ha opuesto a voz en cuello a las acciones de la compañía CP y ha interpuesto quejas ante el gobierno tres veces pero el gobierno simplemente intenta ofrecerle una situación en la que supuestamente “todos ganan”: le ofrece acciones de la subsidiaria Indonesia de CP si retiran su queja.

Ade es claro en señalar que las granjas pequeñas son simplemente las víctimas de las enormes granjas cuando se presenta el caso de la gripe aviar. Dice que no hay brotes serios en las granjas pequeñas; ocurren entre los grandes productores. Mencionó un estudio de 2007 de un centro de estudios analíticos en veterinaria (Centre for Indonesian Veterinary Analytical Studies) que encontró que 84 por ciento de los pollos que llegan a los mayoristas en Jakarta, y que casi todos ellos fueron transportados a la gran ciudad por las grandes compañías avícolas, estaba infectado con gripe aviar.

Ade y otros avicultores de su comunidad y de otras partes del país están haciendo lo posible por manejar la epidemia. pero los esfuerzos no pueden avanzar si se hace tan poco para frenar a los grandes jugadores. Cuando GRAIN le preguntó a Muladno por qué el gobierno hacía tan poco para frenar la gripe aviar en los enormes establecimientos avícolas, fue muy tajante en su respuesta: el gobierno indonesio es “carece de poder” para lidiar con estas corporaciones. 

También en Vietnam, los pequeños avicultores y la diversidad aviar están en la antesala del patíbulo. Aquí también los pequeños avicultores han sido afectados por la gripe aviar que les llega de las fábricas de animales. Hoang Hai Hoa, un funcionario de Agronomes &Vétérinaires sans Frontières (AVSF) en Hanoi, dice que la fuente principal de los brotes entre los pequeños productores de las áreas remotas está en la importación de pollos de granja de los grandes establecimientos —lo cual es una de las razones por las que AVSF respalda la producción local de pollos. Sobre todo, hay muy poco respaldo del gobierno para los avicultores en pequeño en cuanto a la gripe aviar. De hecho, la mayor parte de las intervenciones del gobierno obstruyen o incluso frenan y evitan la producción de pequeña escala.

En la provincia de Ha Tay, por ejemplo, el gobierno requiere ahora que la producción avícola se sitúe en terrenos alejados de cualquier área residencial. Cualquier granjero que se cambie a estas áreas debe, de inmediato, elevar su producción a más de 200 aves. Dado que la mayoría de los productores no puede pagar el cambio a estas instalaciones, simplemente abandonan el oficio.

Pero el negocio tiene un gran repunte para las grandes compañías avícolas de la provincia, que es la fuente principal de la carne de pollo que se abastece en Hanoi. Conforme desaparezca la producción en pequeño, la producción por contrato crece y crece. Actualmente hay 500 establecimientos en la provincia con poblaciones de 4 mil y hasta 10 mil aves, y 250 de ellos hacen producción por contrato para CP. Es tristemente irónico que CP sea quien se beneficie de la situación cuando que el brote inicial de gripe aviar en la provincia se inició en una granja de CP. El señor Binh, director del subdepartamento de sanidad animal, de la provincia de Ha Tay, dijo que en dicha granja había 117 mil pollos infectados, y esa granja abastece de aves a todo el país. De ahí, se diseminó la gripe aviar a todos lados con mucha rapidez.

Otro aspecto no resuelto es el de los límites del sistema de la OMS. Muchos países en vías de desarrollo proponen que el sistema de la OMS debe retener los derechos sobre los materiales virales del sistema de vigilancia aun después de ser transferidos a la industria y otros laboratorios. De ocurrir así, la industria tendría entonces que asumir algunos compromisos cada vez que manipulara materiales del sistema global de vigilancia. Estados Unidos y otros países tales como Japón, prefieren que una vez que los materiales se envíen a las empresas, queden fuera del sistema de la OMS y, por ejemplo, dejen de ser monitoreados por el nuevo sistema de rastreo de virus de la OMS (que se está implementando a sugerencia de Brasil y otros países). 

Un factor importante que coarta un acuerdo es la falta de voluntad de los países industrializados para cambiar el estatus quo. Un cínico refrán entre los delegados de EUA a fines del 2008 era “Nosotros necesitamos sus virus, ellos necesitan nuestra vacuna y nadie necesita este marco de referencia” La industria sin duda ha influido en esta apreciación, muy fuerte en Europa, y ha superado ampliamente en número a las ONG durante las sesiones de negociación. La industria tiene muy pocos deseos de cambiar el sistema de vigilancia. También han interferido en las negociaciones los temores de la industria —rara vez expresados en voz alta— de que un acuerdo de reparto de los beneficios derivados del virus de la influenza podría conducir a que se busquen concesiones con respecto a otros patógenos.

Mientras, el sistema global de vigilancia (GISN) de la OMS continua operando, pero Indonesia y varios otros países ya le limitaron las entregas de H5N1. No obstante, existe el claro peligro de que, si los países en desarrollo no se unen lo suficiente y si no insisten en el reparto de los beneficios específicos, el nuevo marco normativo de la OMS podría obligar a que se le entreguen virus a las empresas sin un mandato apropiado para que se repartan beneficios.

Países que han informado los mayores brotes de gripe aviar en aves de corral a la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE) (+ Indonesia)*

Año

Países

2008

Bangladesh, Benin, Burma, Cambodia, China, Egypt, Hong Kong, India, Indonesia, Iran, Laos, Nigeria, Pakistan, Poland, Russia, Saudi Arabia, South Korea, Thailand, Togo, Turkey, Ukraine, UK, Vietnam

2009
(primeros dos meses)

Bangladesh, China, India, Indonesia, Nepal, Vietnam

Casos Humanos de H5N1 informados a la OMS (hasta febrero de 2009)*

Casos totales: 488
Defunciones totales: 255
Casos totales en 2008: 44
Defunciones totales en 2008: 33

Casi todos los casos (42 de 44) y todas las muertes en 2008 ocurrieron en 4 países: China (4 casos), Egipto (8), Indonesia (24), Vietnam (6). En el año 2009, todos los casos y las muertes confirmadas por las autoridades nacionales y la OMS, han ocurrido en estos cuatro países.

* Indonesia dejó de informar a la OMS los casos confirmados el 5 de junio de 2008 e inició una política gubernamental de no informar los casos en el momento que ocurrían, sino sólo periódicamente. Indonesia no ha informado los brotes en aves de corral desde septiembre del 2006, aunque está bien establecido que el H5N1 continúa prevalente en la mayor parte del país. El gobierno indonesio confirmó públicamente 4 muertes de personas por el virus H5N1 en los dos primeros meses de 2009.

Convertir el sistema global de vigilancia de la influenza en un sistema más equitativo requerirá limitar las solicitudes de patentes. Los países en desarrollo, incluido el Grupo Africano, Tailandia, Brasil, Indonesia y otros, han propuesto que no debería existir propiedad intelectual sobre los materiales del sistema de vigilancia ni sobre los productos que los incorporen.[17]Habrá que ver hasta qué punto tendrán éxito.

Detener las patentes, sin embargo, resuelve sólo una parte del problema. En caso de una pandemia, la capacidad de producción de vacunas contra la gripe es insuficiente para abastecer a los países industrializados, y eso es peor en cuanto a los países en desarrollo. Dado que la capacidad productiva está centrada en los países industrializados, los países en vías de desarrollo están al final de la lista para recibir vacunas, lo que significa que en una pandemia probablemente sufrirán daños desmesurados. Para decirlo brutalmente: los del sur morirán, los del norte se vacunarán.

Para resolver este problema, algunos países en desarrollo están tratando de vincular el uso de los virus del sistema de vigilancia a la transferencia tecnológica. Bajo este sistema propuesto, cuando la industria comercialice en los países industrializados una vacuna desarrollada a partir de virus del sistema de vigilancia, estaría obligada a entregar esta tecnología a los países en desarrollo, por medio de licencias, proveyendo de los conocimientos técnicos necesarios y haciendo contribuciones obligatorias a un fondo diseñado para asegurar que estas transferencias efectivamente se concreten.

Actualmente, la incertidumbre abunda. Nadie puede predecir el momento y la severidad de una pandemia futura. Tampoco se sabe siquiera si la gripe H5N1 será responsable. Prevenir la monopolización de las tecnologías en vacunas y de los recursos de salud pública, sin embargo, reducirá el impacto de futuros brotes. La postura de Indonesia ha alertado a muchos gobiernos sobre las inequidades y la necesidad de reformar el sistema de recolección de virus de la OMS. Pero la presión de las corporaciones y de los países desarrollados por mantener la situación como está (o algo muy parecido a ello), son fuertes. El resultado del conflicto está todavía por verse; pero es de esperar que un nuevo sistema mejore la salud pública al limitar el control de las corporaciones y al poner mayores recursos de salud pública en manos de los países en desarrollo.


Para profundizar

Edward Hammond, Some Intellectual Property Issues Related to H5N1 Viruses, Research, and Vaccines, septiembre de 2008, disponible en, http://www.twnside.org.sg/title2/avian.flu/papers/patent.paper.pdf

Artículos de la Red del tercer Mundo en la revista South-North Development Monitor (SUNS) sobre las negociaciones de la OMS en torno a la pandemia de influenza http://www.twnside.org.sg/avian.flu_news.htm

Organización Mundial de la Salud, página de inicio de la Reunión Intergubernamental de Preparación para una Gripe Pandémica, http://www.who.int/gb/pip/

Blog Immunocompetent, con noticias y comentarios ocasionales sobre las negociaciones de la OMS,  http://immunocompetent.com

GRAIN, “Germ warfare-Livestock disease, public health and the military–industrial complex”, Seedling, enero de 2008, http://www.grain.org/seedling/?id=533

GRAIN, “Viral times-The politics of emerging global animal diseases”, Seedling, enero de 2008, http://www.grain.org/seedling/?id=532

Página electrónica de GRAIN, que da detalles sobre sus publicaciones, documentos externos y otros recursos relativos a la gripe aviar y su impacto en los pequeños productores, http://www.grain.org/birdflu


Notas

1. International Society for Infectious Diseases, “Avian Influenza, Human-East Asia (125): Indonesia, Confirmed”, ProMED-Mail, Archive No. 20050916.2736, 16 de septiembre de 2005. http://tinyurl.com/b9v9e8

2. Comunicación personal con funcionarios del Ministerio de Salud de Indonesia, 2006-7. Ver también, Embajada de Estados Unidos, Jakarta, “Questions and Answers on Avian Influenza (Adapted from US Centers for Disease Control and Prevention and the World Health Organization websites)”, actualización del 9 de diciembre de 2005, http://tinyurl.com/czplu8. Andrew Pollack, “Governments Pressing Roche For More of Its Flu Medicine”, New York Times, 20 de octubre de 2005, http://tinyurl.com/chkr6x

3. Peter Cave, “Failed Indonesia bird flu response concerns experts”, Australian Broadcasting Corporation, 25 de febrero de 2006,http://tinyurl.com/l7z2m

4. Ver Flutrackers.com, especialmente su foro de noticias, http://tinyurl.com/dfykxj

5. Peter Cave, “Failed Indonesia bird flu response concerns experts”, Australian Broadcasting Corporation, 25 de febrero de 2006, http://tinyurl.com/l7z2m

6. Reuters, “Indonesia defends move to block virus sample sharing”, 16 de julio de 2008, http://tinyurl.com/cl4paa

7. La página electrónica de la Red Global de Vigilancia de la Influenza pueden encontrarse en el sitio web de la OMS, http://tinyurl.com/cf76xa

8. Core Terms of Reference for WHO Collaborating Centres for Reference and Research on Influenza, version del 12 octubre de 2006, http://tinyurl.com/c6tnue

9. Ver PCT Patent Application WO2007/100584, Antiviral Agents and Vaccines Against Influenza, publicado el 7 de septiembre de 2007, y depositado por el US Centers for Disease Control and National Institutes of Health.

10. Comunicación personal.

11. Fitri Wulandari, “Indonesia says WHO must set rules on H5N1 sharing”, Reuters, 12 febrero de 2007, http://tinyurl.com/dgmtq8

12. Fitri Wulandari and Ahmad Pathoni, “Indonesia to resume sharing bird flu virus samples”, Reuters AlertNet, 27 de marzo de 2007, http://tinyurl.com/bqofzk

13. Geoff Thompson, “Indonesia claims ownership over strain of avian flu”, Australia Broadcasting Corporation AM programme, 1 de febrero de 2007,http://tinyurl.com/alx3d3
Michael Perry, “Indonesia ban risks WHO flu protection system”, Reuters, 8 febrero de 2007, http://tinyurl.com/bwqkaf
Maryn McKenna, “Virus ownership claims could disrupt flu vaccine system”, CIDRAP News, 19 de junio de 2007, http://tinyurl.com/bjtq9k

14. Estas no son citas textuales, sino lo parafraseado por un testigo para mostrar comunicar el tono de la discusión.

15. Esta primera propuesta de Indonesia no fue nunca publicada como documento oficial de la OMS. Una propuesta posterior hecha por el Grupo Africano, sin embargo, reflejó muchas de las ideas indonesias. La propuesta africana ha sido publicada como “anexo” al documento de la OMS A/PIP/IGM/7, http://tinyurl.com/d62lfp

16. Edward Hammond, “Influenza strains and genes, can be copied from sequence data, undermining the WHO flu benefit sharing system”, trabajo preparado para la Red del Tercer Mundo, julio de 2008, http://tinyurl.com/dmh6xo

17. Ver, por ejemplo, la propuesta por la Región Africana publicada como “anexo” al documento de la OMS A/PIP/IGM/7, http://tinyurl.com/d62lfp


Actualizar: Abril de 2009.
Traducido de:
Ed Hammond, Indonesia fights to change WHO rules on flu vaccines, Seedling, April 2009, http://www.grain.org/seedling/?id=593

Edward Hammond es consultor en aspectos de salud, enfermedades infecciosas, biodiversidad y desarme, y propiedad intelectual. Anteriormente dirigió The Sunshine Project y fue funcionario de programa para RAFI (hoy Grupo ETC). Es ciudadano estadounidense pero vive en Bogotá, Colombia.

Author: Edward Hammond
Links in this article:
  • [1] http://www.twnside.org.sg/title2/avian.flu/papers/patent.paper.pdf
  • [2] http://www.twnside.org.sg/avian.flu_news.htm
  • [3] http://www.who.int/gb/pip/
  • [4] http://immunocompetent.com/
  • [5] http://immunocompetent.com
  • [6] http://www.grain.org/seedling/?id=533
  • [7] http://www.grain.org/seedling/?id=532
  • [8] http://www.grain.org/birdflu
  • [9] http://preview.tinyurl.com/b9v9e8
  • [10] http://tinyurl.com/b9v9e8
  • [11] http://preview.tinyurl.com/czplu8
  • [12] http://tinyurl.com/czplu8
  • [13] http://preview.tinyurl.com/chkr6x
  • [14] http://tinyurl.com/chkr6x
  • [15] http://preview.tinyurl.com/l7z2m
  • [16] http://tinyurl.com/l7z2m
  • [17] http://preview.tinyurl.com/dfykxj
  • [18] http://tinyurl.com/dfykxj
  • [19] http://preview.tinyurl.com/cl4paa
  • [20] http://tinyurl.com/cl4paa
  • [21] http://preview.tinyurl.com/cf76xa
  • [22] http://tinyurl.com/cf76xa
  • [23] http://preview.tinyurl.com/c6tnue
  • [24] http://tinyurl.com/c6tnue
  • [25] http://preview.tinyurl.com/dgmtq8
  • [26] http://tinyurl.com/dgmtq8
  • [27] http://preview.tinyurl.com/bqofzk
  • [28] http://tinyurl.com/bqofzk
  • [29] http://preview.tinyurl.com/alx3d3
  • [30] http://tinyurl.com/alx3d3
  • [31] http://preview.tinyurl.com/bwqkaf
  • [32] http://tinyurl.com/bwqkaf
  • [33] http://preview.tinyurl.com/bjtq9k
  • [34] http://tinyurl.com/bjtq9k
  • [35] http://preview.tinyurl.com/d62lfp
  • [36] http://tinyurl.com/d62lfp
  • [37] http://preview.tinyurl.com/dmh6xo
  • [38] http://tinyurl.com/dmh6xo
  • [39] http://www.grain.org/seedling/?id=593